Síndrome doloroso regional complejo
De diversas formas se conoce también a esta entidad: algioneurodistrofia, distrofia simpática refleja, atrofia de Sudek.
Se lo denomina SÍNDROME ya que agrupa un conjunto de síntomas y signos relacionados entre sí; DOLOROSO ya que el dolor es la condición predominante; REGIONAL porque los síntomas y signos afectan un área y COMPLEJO por la naturaleza dinámica y variada de su presentación clínica.
Es un síndrome regional doloroso que se acompaña de alteraciones vasomotoras y tróficas desencadenadas generalmente por un traumatismo o en otros casos sin causa aparente, y que está localizado a un segmento del miembro. Puede presentarse a cualquier edad si bien es más frecuente entre los 40 y 60 años.
En más de la mitad de los casos no puede establecer se una causa como origen de su aparición. En el 50% restante es secundario a: traumatismos, luxaciones, movimientos forzados asociados a mala posición, movilizaciones precoz, inmovilización, intervenciones quirúrgicas, trombosis vasculares periféricas, infarto de miocardio (originando el síndrome Hombro-Mano localizándose en miembro superior izquierdo), hemiplejias localizadas, enfermedades reumatológicas, afecciones de SNC, infecciones localizadas, entre otras.
Si bien se divide en tres estadios: Estadio I – fase caliente, Estadio II – fase fría o distrófica y Estadio III – fase atrófica, esta división es difícil de realizar en la práctica ya que los 3 estados se pueden superponer en el tiempo.
En el primer estadio predomina un dolor intenso, quemante en una determinada zona, que se acompaña de aumento de la sensibilidad. Ese dolor aumenta con la movilización, con el calor, con la posición de pie y con la marcha. Este cuadro se acompaña de edema (hinchazón), cambio de coloración de la piel, aumento del calor local y sudoración local. En caso de afectar manos y pies las uñas pueden ser finas, quebradizas o con aumento del espesor. El vello puede estar disminuido o aumentado en esa región. El dolor limita la movilidad activa y pasiva. Como consecuencia de un aumento de la vascularización el hueso adyacente comienza a desmineralizarse. Esta etapa puede durar hasta 3 meses.
En un segundo estadio el dolor continua y aumenta con la movilización, la piel presenta cambios de color, está fría, e indurada. La desmineralización es muy marcada, y puede durar hasta 6 meses.
En la tercera etapa el dolor progresivamente desaparece o se atenúa, persistiendo con los esfuerzos. La piel es fina, brillante y pálida. En esta fase pueden aparecer las atrofias y contracturas y severa desmineralización.
Referencias
- Schwartzman RJ, Alexander GM, Grothusen J. Pathophysiology of complex regional pain syndrome. Expert Rev Neurother 2006; 6:669-81.
- Rho RH, Brewer RP, Lamer TJ, Wilson PR. Complex regional pain syndrome. Mayo Clin Proc 2002; 77:174-80.
- Maihófner C, Seifert F, Markovic K. Complex regional pain syndromes: New parathophysiological concepts and therapies. Eur J Neurol 2010; 17:649-60.